Adobe Photoshop es el nombre o marca comercial oficial que recibe uno de los programas más populares de la casa Adobe Systems, junto con sus programas hermanos Adobe Illustrator y Adobe Flash, y que se trata esencialmente de una aplicación informática en forma de taller de pintura y fotografía que trabaja sobre un “lienzo” y que está destinado para la edición, retoque fotográfico y pintura a base de imágenes de mapa de bits, está es la definición de Wikipedia.
La definición de modelos y actrices, sería en mi opinión; programa informatico que me arregla cara y cuerpo en un pispás y me hace aparecer fabulosa en las portadas de las revistas.
Claro que esto no es siempre así, sonados son varios de los escandalos producidos directamente a consecuencia de esta herramienta. Un ejemplo muy sonado de lo que no se debe hacer con Photoshop es lo que le pasó a la bella modelo Filippa Hamilton, en una campaña de Ralph Lauren allá por el 2009, donde habían retocado tanto su cuerpo que se había quedado en la mitad de volumen, haciendola parecer muy muy enferma.
Es curioso que, aún siendo una sociedad concienciada con el problema tan grave que supone la anorexia, se siga aceptando este tipo de fotografía en prensa.
Además del cuerpo de las modelos, también se retoca la cara o el color de la piel. Como en el caso de Julia Roberts o Beyonce respectivamente.
Lancôme tuvo que retirar un anuncio que tenía de protagonista a Julia Roberts, por no ajustarse a la realidad, Julia Roberts lucía una piel como la de un bebé mientras anunciaba la crema, lo que hizo enfurecen a una representante parlamentaria. Esta se quejó a la oficina de control publicitario del Reino Unido y los últimos retiraron el anuncio.
Algo distinto es el caso de Beyonce, que en la portada de su nuevo disco luce delgada, con otra cara y blanca de piel… el sentido de la portada… no lo entiendo.
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